Cómo tratar las hemorroides con remedios caseros

Cómo tratar las hemorroides con remedios caseros

El dolor y la hinchazón que siguen a la inflamación de las hemorroides pueden aliviarse mediante una serie de prácticas útiles en el hogar, además de mantener los procedimientos recomendados para la prevención. Si sus síntomas no desaparecen, consulte a su médico.

Los métodos de autocuración pueden ayudar a aliviar los síntomas, pero no eliminarán la vena dorada . Hable con su médico si sus síntomas no mejoran en una semana o si su dolor es intenso o difícil de controlar. Es bueno saber que además de las prácticas caseras, las preparaciones debidamente preparadas también pueden ayudar a aliviar y eliminar los síntomas, lo que garantiza una curación más efectiva por su efecto comprobado.

Medidas de higiene para aliviar los síntomas hemorrágicos

  • Manten limpia el área alrededor del ano. Si es posible, lava el área alrededor del ano con agua tibia después de cada evacuación. No es necesario usar jabón, puedes secar la piel sensible alrededor del recto y aumentar el dolor. Seca suavemente el área después del baño, ya que la humedad constante puede provocar infecciones por hongos. Luego puedes aplicarte una crema o supositorio anti-hemorroides.
  • Baño caliente para sentarse. Puedes probar tomar baños de inmersión caliente varias veces al día.
  • Agua fría. Si tienes hemorroides externas y los métodos anteriores no te aportan una mejoría, puedes aplicar una compresa de agua fría o congelar la zona alrededor del ano. Esto ejerce un efecto vaso-constrictor alivando los síntomas.
  • Toallitas húmedas. Si tienes hemorroides externas sensibles, no uses papel higiénico seco, sino un paño húmedo (como una toallita para bebés) para evitar irritar la zona afectada.

¡Utiliza cremas y supositorios para el tratamiento de hemorroides! Esto es ideal inmediatamente después de la defecación. Por lo general, consulta al médico en caso que las hemorroides no sangren con alivio o no mejoren en unas semanas con varios remedios caseros. La causa más común de heces frescas de color rojo con sangre son las hemorroides internas. Sin embargo, la sangre puede drenarse a través del recto por otras razones, por lo que es recomendable consultar al médico para descartar enfermedades subyacentes más graves (úlceras de colon y tumores). ¡Acude al hospital de inmediato o llama para pedir ayuda si notas una gran cantidad de sangrado o te sientes mareado o estás a punto de desmayarte!

En un caso de hemorroides avanzado lo que puedes esperar de tu médico es: Diagnóstico, medicación y cirugía para hemorroides.

¿Cómo evitar que las hemorroides aparezcan de nuevo?

El desarrollo o la inflamación de las hemorroides se puede prevenir o retrasar tomando algunas medidas a saber:

Aplica una dieta rica en fibra

Consume muchas verduras, frutas y cereales integrales, así estarás más activo y las heces se pueden evacuar con menor esfuerzo. Esto ayudará a prevenir el desarrollo de nuevas hemorroides y el empeoramiento de los síntomas de las hemorroides existentes. Habla con tu médico acerca de varios relajantes de heces, p. Ej. sobre el uso de complementos alimenticios a base de fibra. Si estás usando un reemplazo de fibra, asegúrate de beber al menos 8 vasos de agua al día, de lo contrario, la fibra extra puede causar estreñimiento. Demasiada fibra puede ser contraproducente.

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Ingesta abundante de líquidos

Si bebes una abundante cantidad de líquido tus cuerpo absorberá menos agua de los intestinos y las heces serán menos duras. La cantidad de agua u otros líquidos que necesitas depende de tu edad, salud y actividad física.

¡No parmanezcas parado o sentado en un solo lugar durante largos períodos de tiempo!

Si te quedas sentado por mucho tiempo (especialmente si está en el baño), la presión arterial en las venas alrededor del recto aumentará, lo que hará que tu condición y las hemorroides regresen o empeoren.

Ejercicio regular

Si tienes un trabajo prolongado de pie o sentado, si es posible, interrumpe el trabajo con una pequeña caminata o movimiento, lo que mejora el flujo de sangre venosa de la parte inferior del cuerpo y reduce la presión sobre las venas. Los movimientos ligeros frecuentes que alivian la postura estática son útiles para prevenir las venas varicosas de las extremidades inferiores y la trombosis venosa, e incluso pueden ayudarte a reducir la cantidad de líquidos retenidos y a bajar de peso saludablemente.

¡No hagas tanta fuerza!

La fuerza y la retención de aire que se ejerce al momento de la defecación puede crear una mayor presión en las venas de la parte inferior del recto. Para evitar esto, solo ve al baño inmediatamente si tienes un estímulo para defecar. Si permaneces mucho en esa posición, la materia fecal se volverá más seca y será más difícil vaciarla. Además, evita levantar objetos pesados ​y hacer ejercicios de fuerza que comprometan la zona afectada, tanto como te sea posible.

¡Trata esa tos a tiempo!

Si tienes una enfermedad respiratoria relacionada con la tos, comienza un tratamiento efectivo que te permitan reducir las secreciones de las vías respiratorias para eliminarlas tan pronto como sea posible, evitando así la posibilidad de recurrencia de la tos. El movimiento abdominal involuntario que se produce debido a la tos crónica puede afectar a los pacientes con hemorroides, agravando su condición.

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